- Habla con tus seres queridos, realmente te pueden ayudar.
- No te sientas culpable o avergonzada.
- Si puedes, mantente activa, es bueno para ti y para el bebé.
- Intenta descansar cuando lo necesites.
- Aparta un poco de tiempo para ti misma al menos una vez al día. ¿Tal vez puedas darte un baño caliente o escuchar un podcast mientras caminas?
- Pide ayuda a tus seres queridos para las cosas prácticas. Cocinar, hacer las compras, cuidar a los niños, lo que sea que te ayude a aligerar la carga.
- Reúnete con personas que estén pasando por lo mismo. Pregúntale a tu médico sobre foros o grupos locales.
- Descansa del café. Hay un límite recomendado de cafeína durante el embarazo.
- Come bien. La nutrición adecuada es esencial. Y ahora, más que nunca.
- Haz tiempo para cuidarte a ti misma. Intenta terapias complementarias como masajes relajantes o meditación. Las apps de mindfulness son muy útiles.
- Siempre ten a la mano ejercicios simples de respiración para aliviar el estrés.
- Planea con anticipación. Anotar algunas tareas cada semana puede ayudarte a recuperar el control.
- Si te sientes abrumada por el prospecto de convertirte en madre, echa un vistazo a nuestra lista para ayudarte a prepararte emocionalmente.
- Consulta a tu médico si necesitas más apoyo.